Es frecuente preguntarse qué hacemos con nuestra mascota una vez que disponemos de un periodo de vacaciones, ya sea verano, Navidad, un puente o, sencillamente, unos días libres que has podido conseguir. Por ello, desde Animalear te ofrecemos una serie de recomendaciones una vez que llegan estos periodos.
Antes de empezar: Planificación
Lo primero que uno consulta una vez que ha decidido su destino es el alojamiento. Generalmente, en las páginas de los propios establecimientos está indicado si aceptan mascotas o no (tanto en hoteles como en apartamentos), por lo que será lo primero que debamos mirar. Una vez que lo sepamos, comprobaremos las condiciones de la estancia para ver que se ajusten a lo que estamos buscando y haremos la reserva.
Transporte
Cada tipo de transporte tiene sus particularidades, resumiremos lo más importante de ellas:
1. Coche: Los perros no regulan el calor de la misma manera que nosotros, por lo que será necesario intentar hacer el viaje en las horas de menos calor, procurar que esté fresco y hacer paradas frecuentes para hidratarle. Por supuesto, es recomendable que no viaje con el estómago lleno y hacer una conducción estable y tranquila ya que puede marearse. En ese caso, la hidratación, un pequeño paseo o ciertos medicamentos (con prescripción) ayudarán a que se le pase. Algunas marcas como Nayeco te ofrecen no solo trasportines, sino otros accesorios para su comodidad como fundas para los asientos o cinturones de seguridad.
2. Tren: No existe una normativa genérica ya que tenemos muchos tipos de trenes (cercanías, AVE, media distancia…) y cada uno tiene sus particularidades. Sin embargo, lo que debes saber es que, en primer lugar, el transporte de animales es posible siempre y cuando el resto de viajeros no se opongan ya que los propios interventores podrían negar su acceso. Además, los perros que son admisibles son los más pequeños (unos 8 kg) y siempre en su trasportín. Es altamente recomendable que mires las condiciones particulares según el tren que vayas a escoger, no solo por los requisitos de acceso sino también por el precio que puedas pagar.
3. Avión: Parecido al tren. Es necesario consultar las normas específicas de cada compañía ya que hay algunas que no admiten ningún tipo de animal, otras que permiten llevarlo en la propia cabina (siempre que sea pequeño y no genere molestias) y otras que tan solo aceptan que vayan en la bodega. Por lo tanto, antes de reservar el vuelo consulta las condiciones.
4. Barco: De nuevo será necesario ver las condiciones de cada compañía para asegurarte de que aceptan a tu mascota. También deberás revisar el régimen de visitas, ya que lo más seguro es que esté alojada en una zona concreta a la cual no puedas acceder y exista un protocolo específico. Además, ten en cuenta que se puede marear, por lo que, igual que ocurre con el coche, deberás consultar con tu veterinario posibles soluciones ante ello.
Otras consideraciones
No te olvides nunca la cartilla sanitaria con sus vacunaciones y desparasitaciones en regla, lleva siempre agua para hidratarle en caso de que se maree y sus accesorios para poderlo pasear y transportar correctamente. Es muy recomendable que consultes a tu veterinario sobre cualquier punto mencionado anteriormente además de cualquier punto característico del viaje (clima del lugar, pasaporte veterinario si viaja al extranjero, actividades que vayas a realizar, posibles contratiempos…).
(No Ratings Yet)
Cargando...