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¿Por qué las tortugas son tan lentas?
Todos alguna vez nos hemos preguntado por qué las tortugas, en especial las terrestres, son tan lentas al desplazarse. ¡No te preocupes más! En nuestro artículo de hoy, resolveremos todas las dudas acerca de por qué las tortugas se encuentran entre los animales más lentos del mundo.
Caparazón: escudo protector
Está demostrado científicamente que las tortugas no tienen la necesidad de moverse con rapidez, ya que llevan acuestas su caparazón. Este escudo acorazado las protege de cualquier peligro que pueda encontrarse en su entorno, ya que, al sentirse amenazadas, estas pequeñas esconden todo su cuerpo hasta que se sienten a salvo y pueden volver a salir.
Gastan menos energía
La lentitud de las tortugas, también es ventajosa para ellas, ya que estos animales al trasladarse con tanta calma y no realizar grandes esfuerzos, gastan menos energía y, por tanto, necesitan menos para mantenerse con vida.
Simplemente somos lentas
Las tortugas son lentas simplemente porque no tienen ninguna necesidad de ser rápidas. A lo largo del tiempo, los animales han evolucionado y se han ido adaptando según sus necesidades y el ecosistema en el que viven. Muchos de estos han desarrollado más habilidades y se han vuelto más ágiles o rápidos, ya que necesitan de esto para cazar o defenderse; pero las tortugas no. Estas pequeñas solo tienen que esconderse con cada señal de peligro. Para alimentarse, es igual de sencillo, en tanto que las hierbas y los vegetales, que son la fuente principal de su dieta, se encuentran a su alcance.
Pero no todas las tortugas son “lentas”, entre las más de 250 especies de tortugas que existen en el mundo, se encuentra Bertie, el “Usain Bolt de las tortugas”; quien se ha convertido en la tortuga más rápida al recorrer la distancia de 5,48 metros en ¡19,59 segundos!, según el Libro Guinnes de los Récords.
Por el contrario, sus hermanas las tortugas marinas son animales mucho más rápidos. Estas son excelentes nadadoras y pueden alcanzar una velocidad promedio de 30Km/h.
Tip Animalear
Recuerda que, si deseas que tu tortuga crezca sana y feliz, debes brindarle el mejor cuidado. Aliméntala con comida que posea un alto contenido de fibra; bríndale suplementos de calcio y vitaminas para mantener su caparazón sano y fuerte; proporciónale siempre agua fresca y un terrario amplio y espacioso, donde ella pueda explorar y pasearse con libertad. Así mimo, ten presente que la higiene es muy importante para que tu tortuga desarrolle una buena calidad de vida y 15 minutitos diarios al sol, la convertirán en una morena y feliz mascota.